Cabo Rojo, Pedernales, – En un acto que marca un hito en la infraestructura turística del país, el presidente Luis Abinader inauguró una innovadora planta de tratamiento de aguas residuales en Cabo Rojo, convirtiéndose en la primera de su tipo en el desarrollo turístico nacional. Esta obra, que representa una inversión de RD$1,304 millones, refuerza el compromiso con el desarrollo sostenible del Sur del país.
El director ejecutivo del Fideicomiso Pro-Pedernales, Sigmund Freund Mena, subrayó la singularidad de esta iniciativa, destacando que es la primera vez que un sistema de tal envergadura se materializa antes de la apertura de cualquier infraestructura hotelera. Freund Mena afirmó que Cabo Rojo se erigirá como el legado de la administración de Abinader, transformando no solo el panorama socioeconómico de la región, sino también trazando un futuro lleno de esperanza.

La planta, diseñada para funcionar con un sistema de lodos activados en modalidad de aireación extendida, gestionará eficazmente los desechos generados por diversas instalaciones del proyecto, incluyendo hoteles y el nuevo aeródromo. Este sistema innovador no solo asegura la producción de agua tratada de alta calidad, sino que también permite su reutilización en actividades agrícolas y la generación de composta.
Freund Mena destacó que esta obra, que es parte integral de las infraestructuras hidrosanitarias del proyecto, garantizará la distribución de agua potable y el tratamiento adecuado de las aguas residuales. Además, agradeció al presidente Abinader por la confianza depositada en el equipo del fideicomiso, lo que ha sido crucial para la realización de este ambicioso proyecto.

El evento también contó con la participación de diversas personalidades, entre ellas la gobernadora Edirda D’Oleo, el viceministro de Turismo Carlos Peguero, y el senador Secundino Velázquez Pimentel. La bendición de la obra fue realizada por el reverendo Germán Ramírez, quien pidió por el éxito del proyecto y el bienestar de la comunidad local.

Con una capacidad de procesamiento de 164.000 litros por segundo y un sistema de automatización para su operación continua, esta planta refuerza el compromiso del gobierno dominicano con un modelo de desarrollo turístico que respeta y protege los recursos naturales. El destino Cabo Rojo se perfila así como un referente de sostenibilidad ambiental en el ámbito turístico.